Cuando entré en la cueva, el enorme dragón que había vencido ya no estaba ( como iba a estar si lo vaporicé º-º) bueno, pero había otro cosa: un minotauro (sinceramente, pensé que esas cosas eran mitológicas, después cuento lo que es en realidad) Era algo así:
Era horrible, tenía unos cuernos parecidos a los de un antílope, y su cabeza mas que de humano peludo parecía la de un león! era muy musculoso y grande , por lo que deducí que era algo lento, tenía unas garras impresionantemente grandes para el tamaño de sus manos y sus patas y cola eran de toro.
-Que??? no sabía que estas cosas existían de verdad! esto me enseña que la escuela me miente! - dije mientras esquivaba un golpe.
Entonces, con decisión, el toro empezó a perseguirme por toda la cueva , hasta que pensé:- claro! Tengo una espada nueva!!!- en ese mismo instante saqué la espada excalibur (que por cierto era muy pesada para manejarla con facilidad) , y con el primer espadazo le corté uno de los cuernos, lo que solo sirvió para que se enfureciera mas. -Un ultimó intento, vamos!- dije mientras corría hacia el minotauro y le clavaba la espada al pecho. El minotauro cayó herido mortalmente, y vi algo en su pecho que brillaba. Cuando me acerqué vi una pequeña llave con diferentes figuras irregulares, entre las que solo pude distinguir un ojo. Esta es la llave :
Cuando la agarré pude recordar que en el pedestal donde encontré la espada excalibur había una cerradura pequeña, no perdía nada en intentarlo. Me lancé al pozo y caí en el pedestal. Busqué la cerradura , metí la llave y la giré. Al hacer esto, el pedestal se abrió en dos y dejó al descubierto una escalera que descendía . Cuando comencé a bajar (creo que bajé la escalera por horas) , me encontré en una mazmorra. una placa en una pared decía : "Camino a la iluminación". En el medio de la habitación había un cofre con otra placa que decía : "El traje legendario del dragón" , y cuando quise abrirlo, una fuerte descarga eléctrica me tiró a suelo. También había un banco de madera, en el que no me resistí a sentarme. Cuando me senté sentí que podía dominar todos los aspectos de mi cuerpo, mis ojos se volvieron amarillos y me sentí poderoso. Cuando me levanté, no perdí el control de mi mismo como pasaba siempre que mis ojos se volvían amarillos. Vi que en el cuarto el cofre se había abierto de la nada y fui a mirar. Dentro del cofre había un traje magnifico. Lo tomé y sin ponérmelo, lo metí en la mochila y salí hacia esa especie de fortaleza donde estaban los participantes del torneo.-Ninjaskan! date prisa! La final es en una hora ! donde has estado?- me preguntó Ambio
- Una hora????? estuve fuera 6 días?- Me iré a cambiar y voy a la arena.
Cuando fui a mi habitación, me puse el traje y mis ojos se tornaron amarillos. Podía controlarme! Salí corriendo de la habitación y me dirigí a la arena. Los que me vieron legar, solo me vieron así , listo para pelear, espada en mano:
